La Unidad de Currículum y Evaluación del Ministerio de Educación, desde el año 2019 ha estado desarrollando una propuesta para la actualización de los instrumentos curriculares de la Formación Técnica Escolar (especialidades y oficios), en la cual se incluye la vinculación con el Marco de Cualificaciones. En este desarrollo se ha realizado un prototipo que permite mostrar los cambios en las definiciones curriculares, desde bases curriculares a programas de estudios.
En una jornada virtual convocada por el Mineduc, realizada el 24 de septiembre, se presentó la propuesta general para todas las bases curriculares técnico profesional y la aplicación en una de las especialidades del sector minero, en cuyo desarrollo participó el Consejo de Competencias Mineras (CCM), en un reconocimiento por el liderazgo en la estrategia de vinculación formativo laboral, la alta valoración de los estándares de competencias, cualificaciones incorporadas en el Marco de Cualificaciones (MCM), los instrumentos adicionales como las rutas formativas, los módulos de formación y los estudios de Fuerza Laboral.
Verónica Fincheira, gerente Consejo de Competencias Mineras, destacó que “uno de los principales avances que se espera para este año es la incorporación del Marco de Cualificaciones y el poblamiento del sector minero en las bases curriculares de educación media y de formación de oficios a nivel nacional, ya que esto es una acción concreta de vinculación entre el mundo de la formación con el sector minero, para que los jóvenes comiencen a tener un lenguaje común con el mundo del trabajo”.
Lo que se quiere lograr con los principales cambios y actualizaciones del desarrollo curricular técnico profesional escolar, además de tener las definiciones formativas más amplias con una orientación del sector, es lograr un mayor protagonismo de los actores del sistema de formación técnico profesional escolar y tener los instrumentos curriculares conectados a competencias laborales y cualificaciones.
Para el Consejo de Competencias Mineras, es importante contar con programas de estudios que respondan a las competencias que requiere el sector productivo adecuándose flexiblemente en cada uno de los territorios, y que también faciliten las articulaciones entre los distintos espacios y niveles de formación técnica para favorecer el desarrollo de los talentos de jóvenes y adultos. Hacia allá debe avanzar la formación técnica del país y el CCM está disponible para ser un actor clave que lidere la estrategia y acompañe los procesos de definiciones, convocando a otros, apoyando la toma de decisiones y conectando el mundo de la formación con el mundo productivo y la sociedad.
Carolina Aguila, Jefa de Proyectos del área de Desarrollo Humano de FCH, detalla que lo que está haciendo el CCM es ejemplar, colaborando con la mirada de la industria a las nuevas bases curriculares, destacando que “estamos articulando con distintos actores, a través de las experiencias que hemos tenido con distintas iniciativas como Eleva, el Marco de Cualificaciones en todas sus versiones, dando nuestra señal desde el sector minero”.
Se espera que el lanzamiento de estas bases a nivel sectoriales y el nuevo currículum de minería sea para el 2022.